Los mejores sabores de Castilla y León y un servicio muy personal definen esta ‘casa de comidas’ en la que los platos son una fábula.

Los madrileños estamos de suerte, y aún más los palentinos con morriña. Un trocito de Palencia ha llegado a Madrid, y no cualquier trocito, sino una ‘delegación’ del mejor restaurante-hotel de Palencia, Estrella del Bajo Carrión, que lleva 35 años elaborando las recetas ‘de siempre’, con una excelente materia prima y un cariño maternal que se aprecia en el paladar.

Todos esos sabores los tenemos ahora en Madrid gracias a Villoldo, una nueva ‘casa de comidas’ cuya despensa está llena de lo mejor de los sabores castellano-leoneses. Lo mejor porque una de las propietarias, Pilar,  y su hijo, que colaboran juntos en los fogones, se encargan de seleccionar todos los ingredientes, y lo hacen yendo de pueblo en pueblo para acercar a su clientela lo mejor que la tierra nos ofrece. Y es que Villoldo solo trabaja con pequeños proveedores que puedan garantizar al 100% la frescura y sabor del producto. La misma Pilar embota y crea su despensa de confianza, con un abastecimiento de máxima calidad que utiliza para toda la temporada. Con esa dedicación no es de extrañar que cada plato hable por sí solo.

La carta está llena de sugerencias apetecibles que resumen la culinaria de la extensa comunidad de Castilla y León, con propuestas como Cecina de vaca de Astorga con rúcula y lascas de queso viejo zamorano; ensaladas y verduras que ofrecen lo mejor de la tierra y el mar, como Verduras a la brasa con huevo de corral a baja temperatura y chorizo de matanza o Ensalada de bonito del norte embotado en casa con tomates y pimientos. ‘De la casa de siempre’ llega su especialidad, Alubias blancas viudas de la Vega de Saldaña, elegidas minuciosamente. La carne procede de piezas cuidadas y alimentadas por ganaderos particulares, así el cochinillo, el lechazo churro y la ternera mantienen el sabor y la naturalidad de su crianza. Entre los pescados se puede elegir ‘el del día’, su Merluza en salsa verde, como siempre o los Chipirones en su tinta rellenos de sus patas, jamón y huevo, que llegan todas las semanas desde Santander. Y para finalizar dulcemente, el Tocinillo de cielo al estilo de Villoldo con helado de coco y piña caramelizada es una opción perfecta.

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Villoldo

Lagasca, 134. Madrid / Tel.: 91 022 45 52 / Precio medio: 35-40 €.