Platos internacionales y vinos ecológicos en un ambiente que te conquistará. Para viajar por el mundo sin moverse de la mesa.

Clarita es amigable, cercana, acogedora… Uno de esos lugares a los que cuesta decir adiós y un referente para la gente cool de la capital.

En su carta no encontrarás entrantes, primeros o segundos. En Clarita todo es para todos, con propuestas como Pulpo a la brasa, cachelos de patata asada y chutney de mango —un homenaje a Galicia—, el Tartar de salmón, mostaza dulce, eneldo y rúcula —un recuerdo de Noruega—, los Rollitos vietnamitas artesanos rellenos de verduritas con salsa agridulce —un trocito de Vietnam— o su demandada Hamburguesa gourmet de ternera 100%, con queso tetilla fundido, cebolla caramelizada, tomate raf y canónigos —un paso por Nueva York—. El punto dulce lo ponen postres como el Tatin Clarita con manzana salteada, crujiente de filo, salsa de caramelo y helado de vainilla —un pedacito de Francia— y la famosa Torrija caramelizada con helado de dulce de leche. Sin duda, todo un viaje para el paladar.

La carta de vinos tampoco deja indiferente, con referencias que provienen de pequeñas bodegas artesanales, con carácter ecológico, de mucha calidad y nada fáciles de encontrar. Corriente (Tempranillo D.O. Rioja), Navalegua 2010 (Garnacha tinta. Montes de Toledo), Gaba do xil (Mencía. Valdeorras 2009) o La Malkerida (Bobal. Valencia) son algunos ejemplos.

Su decoración bohemia, sencilla y acogedora, es otro de sus puntos fuertes. Además, Clarita cuenta con varios ambientes en un mismo espacio: tiene barra, restaurante y otras dos zonas con sofás y sillones rojos perfectas para disfrutar de un buen café o un cóctel si vas de afterwork.

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Clarita

Corredera Baja de San Pablo, 19. Madrid / Tel.: 91 522 80 70 / www.claritamadrid.com / Precio medio: 21 €.