También tés, café, tartas caseras… Todo en uno de los locales más emblemáticos de Madrid. 

Papel pintado, madera, cómodos sofás chester, sillones ball chair, sillas de Saarinen, lámparas de Philippe Starck… Eso es lo que uno se encuentra al cruzar la puerta de Tempo Club.

Una puerta que puede cruzarse desde primera hora de la tarde porque a Tempo Club no solo se va de copeo. Ofrecen una amplia selección de tés —no te pierdas el verde con lima japonesa o el té negro con mango— y cafés acompañados de exquisitas tartas caseras como la de dos chocolates, frutas y flores, además de zumos naturales o batidos varios —muy original el lassi con base de yogur, fruta y cardamomo, de origen hindú—.

Por supuesto puedes lanzarte directamente a su carta de cócteles, obra del bartender argentino Maximiliano Raigal. Puedes elegir entre un Sazerac —con bourbon, coñac, absenta, Peychaud´s Bitters y azúcar—, un Vesper Martini —Vodka Ketel One, Gin Tanqueray Ten, Lillet Blanc y piel de limón—, el Eien No Haru —Vodka Ketel One, frambuesas flambeadas, jengibre, sake, zumo de yuzu japonés— o el Etta Flip —Grand Marnier Rouge, huevo, puré de lúcuma, algarrobina y nuez moscada—.

Si eres de esos a los que les cuesta decidirse puede que se te presente un gran dilema  porque hay cartas de absolutamente todo, desde marcas Premium de tequila hasta bourbon, ginebras, whiskies, rones, vodkas…, siempre mezclando lo moderno con lo clásico y de autor. Entre los gin tonics destacan el Bulldog & Fever Tree —con hoja de lima kaffir y regaliz— o el Tanqueray Rangpur & 1724 —con zeste de mandarina y kumquat—. También hay degustaciones de mini gin tonics.

La parte de abajo del local alberga discoteca, barra y sala de conciertos. Los miércoles son para las jam sessions y los jueves, viernes y sábados, a partir de las 23 h, para conciertos de todo tipo —por su escenario han pasado artistas como Alice Russell, Fred Wesley o New Mastersounds, y entre los nacionales Freedonia o Sweet Vandals—.